Consejos sobre cómo alquilar una habitación
Si tienes una vivienda y quieres alquilar una habitación, debes seguir una serie de pasos para tener la certeza de que realmente lo vas a hacer bien. Como sucede a la hora de alquilar una vivienda, no tienes que meter a cualquier persona en una habitación.
Cuando lances la oferta de alquiler de una habitación, seguramente te llegarán diferentes ofertas a través de las cuales tendrás la certeza de que la misma ofrece mucho interés. Gracias a esas ofertas, tú tendrás que seleccionar al mejor candidato para asegurarte que te va a pagar y la convivencia va a ser buena. Y para ayudarte, te vamos a mostrar un listado de consejos con los cuales te será más fácil alquilar una habitación de manera segura.
1- Elige un buen precio
Una de las primeras cosas que deberás hacer es elegir un buen precio para el alquiler de la habitación. No queremos que la regales, pero tampoco que pongas un precio demasiado alto. Si lo haces, no tendrás candidatos y en consecuencia la habitación se quedará vacía y no obtendrás el dinero que piensas.
Para ofrecer un precio justo, lo mejor que puedes hacer es analizar el mercado. Mira que precios están ofreciendo en la zona por una habitación más o menos de las mismas características. Así te podrás hacer a la idea y te será más fácil poner un alquiler a la habitación realista. Siempre tienes que estar en el promedio para tener más opciones de éxito.
2- Amuebla la habitación
Para que haya más candidatos a vivir en la habitación, lo mejor que puedes hacer es amueblar la habitación. No queremos decir que la tienes que amueblar a todo lujo, pero sí que deberás ofrecer las cosas básicas.
Entre otras cosas, deberás ofrecer al inquilino una cama, un armario, un escritorio con silla… Dependiendo de tu presupuesto, podrás ofrecer más o menos cosas. Pero lo mínimo sí que lo deberías ofrecer para que las personas puedan tener interés en la habitación.
También es importante entregarla limpia. Si ves que está muy sucia, límpiala y si es necesario, aporta una mano de pintura. Lo importante es que cuando el inquilino visite la habitación se sienta a gusto y tenga interés de alquilarla.
3- Alquiler garantizado de habitaciones
Como sucede cuando alquilamos un piso, si realmente queremos que los ingresos sean fijos, lo mejor que se puede hacer es contratar el servicio de alquiler garantizado de habitaciones. Pocas personas lo conocen, pero es como el servicio garantizado de alquiler de viviendas, solo que se centra en las habitaciones. Es una gran opción para garantizarse los ingresos a través de una empresa seria que sabe cómo actuar en cada caso.
Actualmente la mejor opción es solicitar los servicios de la Sociedad Española de Alquiler Garantizado, a través de la cobertura especial de alquiler garantizado de habitaciones. Con este servicio, podrás tener el cobro garantizado.
A través de SEAG podrás cobrar tu alquiler garantizado todos los meses. Es decir, en caso de que no te pague el inquilino, la empresa se hará cargo y tú seguirás cobrando. Tiene un mes de carencia y no hace falta que se dé una sentencia en firme para que se realice el pago.
A través de ese servicio también vas a poder disfrutar de otras muchas coberturas. Por ejemplo, muchas personas contratan este servicio porque a cambio de una pequeña cuota pueden disfrutar de una defensa jurídica de máxima calidad. La empresa cuenta con un equipo de abogados especializados, lo que significa que ellos se encargarán de todos los trámites para que tú no tengas que preocuparte de nada. Incluso pueden asumir los gastos de las notificaciones, procurador, poderes judiciales… Vamos que se encargan de todo. Sin lugar a dudas, merece la pena pagar esa pequeña cuota a cambio de tener la seguridad que ofrecen. Es verdad que solo estamos alquilando una habitación, pero tener esos ingresos asegurados es realmente importante.
A todo eso hay que añadir que incluso cuentan con una cobertura especial que cubre los daños de vandalismo que el inquilino haya podido realizar a la habitación. Dependiendo de la cobertura contratada, los gastos asumidos podrán ser mayores o menores, siendo el importe máximo de 3000 euros. Y con la ventaja de que no hay ningún tipo de franquicia.
Y si te preguntas cuanto cuesta, en la página de SEAG podemos ver que para un alquiler de habitación de 400 euros al mes, cuyo importe anual es de 4800 euros, la cuota anual sería de sólo 168. Por ese poco dinero podrás tener la certeza de que siempre vas a cobrar. Es algo que cada vez más propietarios hacen para asegurarse los ingresos.
4- Elige el mejor inquilino
A la hora de dejar entrar a tu casa a una persona, siempre tienes que intentar asegurarte que es una buena persona. No siempre se acierta, pero si se realiza un buen estudio sobre la misma te será más fácil encontrar al mejor candidato. No cometas el error de alquilar la habitación a la primera persona que pase. Haz un estudio y quédate con la mejor opción.
A la hora de alquilar una habitación, no solo tendrás que mirar si la persona tiene ingresos fijos o no. También puedes intentar ver su personalidad entre otras cosas. Piensa que vas a convivir con esa persona, mejor llevarse bien que mal.
5- Conoce tus derechos y obligaciones
Como propietario que va a alquilar una vivienda, es fundamental que conozcas tus derechos y también tus obligaciones. Si quieres que el alquiler no dé problemas a medio y largo plazo, te recomiendo que te informes para evitar posibles problemas futuros.
Ya sabemos que tú querrás defender tus derechos, pero el inquilino también los querrá defender. Por ese motivo, si conoces tus obligaciones con esa persona, te será más fácil cumplirlas y no tener problemas. Los problemas siempre se traducen en enfrentamientos y los mismos en una mala convivencia. Y eso en una misma casa no es una buena idea.
6- Comunicación
La comunicación entre las partes siempre es importante para que la convivencia sea positiva. Si no quieres tener problemas, te recomiendo que te comuniques con el inquilino. Esa comunicación deberá ser buena tanto antes como durante y después. La comunicación siempre ayuda a que la convivencia en la vivienda sea buena. Recuerda, vas a alquilar una habitación, pero algunas zonas comunes las vas a tener que compartir.